En España tenemos, como consumidores, 7 días hábiles para hacerlo, sea cual sea la razón, siempre que no se trate de un producto perecedero, sensible al mínimo uso, o ropa interior, claro está.
En España tenemos, como consumidores, 7 días hábiles para hacerlo, sea cual sea la razón, siempre que no se trate de un producto perecedero, sensible al mínimo uso, o ropa interior, claro está.